DESDE MI VENTANA OPTICA ::: PROFANADORES DE CONCIENCIA

DESDE MI VENTANA OPTICA ::: PROFANADORES DE CONCIENCIA

"Debemos estar ojo avizor e investigar, quiénes fueron los que se asociaron a los profanadores del Registro Civil, para robarse la conciencia de los dominicanos, cuáles ex presidentes de la JCE se hicieron de la vista gorda ante tal afrenta, para aplicarles la máxima Duartiana" sostiene Almánzar.

POR ALEJANDRO ALMANZAR

NEW YORK.- Nadie se imaginaría, que un proyecto de nación tan bien concebido, desarrollara tantas debilidades institucionales. Probablemente, después de Haití, República Dominicana sea el país menos organizado en materia de Registro Civil.

Eso dio oportunidad a profanadores de conciencia humana a asaltar el Registro Civil, suplantar documentos y declarar a extranjeros como dominicanos, según denunció Roberto Rosario, presidente de la JCE.

Esto  debería llenarnos de asco y vergüenza, que enemigos de la patria se adueñaran por décadas de nuestras determinaciones, profanando el estado de derecho y robándose la identidad nacional, contando con la perversidad de funcionarios que poco les importa el sacrificio de los trinitarios.

Trujillo mantuvo controlada la inmigración haitiana, pero nunca se amparó en leyes para evitarla. Balaguer se pasó la vida denunciando planes conspirativos de sectores, pero tampoco pasó de las palabras a los hechos.

Por eso, después de tanta impunidad, sólo nos queda lidiar con la presencia de individuos que nadie sabe cómo se llaman, cuándo y dónde nacieron, de lo que nada más se beneficiaron empresarios de la industria cañera y la construcción.

Si no hacemos conciencia del problema, y explotadores siguen detrás de manos de obras baratas, cuando despertemos, será con pesadilla. La Sentencia 168/13 ha puesto al desnudo la fragilidad de las instituciones gubernamentales.

Los haitianos nos invadieron sin tirar un tiro en el 1822, y esta vez, malos dominicanos les han puesto en bandeja de plata la Soberanía Nacional. Estoy de acuerdo con el presidente Medina, se trata de un problema humano, al que el Estado tiene que buscarle solución.

Pero esta no puede apartarse de lo que establece la sentencia del Tribunal Constitucional, cero presión de ONGs y sus lacayos. Nada de decisión política, ni arreglos por conveniencias. Si el Estado haitiano tuviera control de sus nacidos, el problema sería sencillo, pues ambas naciones cruzarían informaciones.

Pero en Haití, más del 80% de la población carece de Certificado de Nacimiento, y lo que se plantea es, que el país asuma como dominicano, a todo el que diga nací aquí, y eso sencillamente, es inaceptable.

Nuestro Registro Civil anduvo mangas por hombros, hasta que aparece Roberto Rosario, y destapa este barro de inmundicia, con lo que muchos se hicieron millonarios. Los que profanaron el Estado, son los mismos que falsificaron la firma de Duarte, para suplantar identidades y robarse la ciudadanía dominicana.

Debemos estar ojo avizor e investigar, quiénes fueron los que se asociaron a los profanadores del Registro Civil, para robarse la conciencia de los dominicanos, cuáles ex presidentes de la JCE se hicieron de la vista gorda ante tal afrenta, para aplicarles la máxima Duartiana.

“Mientras no se escarmiente a los traidores como se debe, los buenos dominicanos serán siempre victimas de sus maquinaciones". Como el patricio, también admiro y respeto al pueblo haitiano, reconozco su grandeza, sólo rechazo la intentona de grupos, que los usan para acarrearle problemas al país.

EL AUTOR ES PERIODISTA

RESIDE EN NEW YORK