DESDE MI VENTANA OPTICA ::: NO TENGAMOS MIEDO

DESDE MI VENTANA OPTICA ::: NO TENGAMOS MIEDO

"Escuchemos y hagamos nuestras las sabias palabras del Papa Francisco, para que encontremos el verdadero sentido de la vida como hijos de Dios, de ese padre todo amor, que se regocija con nuestro triunfo y se atribula con nuestra desgracia" enfatiza Almánzar.

POR ALEJANDRO ALMANZAR

NEW YORK.- Desde la llegada al Trono Eclesial de Juan Pablo II, en 1978, la jerarquía católica comenzó a quitar parte de la venda a la humanidad, iniciándose una nueva época en el catolicismo.

Su reinado dio un giro total a lo que había sido el accionar de la Iglesia hasta entonces, pidiendo a su feligresía no sólo hablar de la grandeza y bondad de Jesús, si no, pasar de las palabras a los hechos, imitándole.

Con esa predica, peregrinó por el mundo, llevando mensaje de amor, paz y de reencuentro entre los humanos, esto, a pesar del patrón establecido a lo interno de dicha institución religiosa, difícil de modificar, e imposible de cambiar.

Por eso, la arenga del nuevo encargado del Vaticano, un orgullo para las Américas, demuestra que las semillas regadas porKarol Józef, ya comienzan a dar frutos. En su mensaje a los jóvenes de la Plaza San Pedro, en Roma, Francisco los invitó a no tener miedo, y aferrarse a la verdad.

Discurso muy distante de la práctica de la Congregación de Agustín de Hipona, quien se ha alimentado por siglos de ocultar esa verdad, que al decir de Jesús, el Cristo, al conocerla, nos haría libres. Es el mejor mensaje de un pastor empeñado en el crecimiento espiritual, intelectual y social de su rebaño.

Que no persigue conducirlo al corral a obedecer sumisamente imposiciones teológicas, para que vivan vendados, convertidos en pobrecitos vivientes, con el único derecho a nacer y a “morir” sin saber por qué, ni para qué vinieron al mundo.

Seres, que sólo pueden rogar a un Dios caprichoso, vengativo e impredecible, que si está de buen humor les premia, si no, los manda al “fuego eterno”. No tengamos miedo a denunciar las atrocidades cometidas por quienes en el nombre de Cristo han acumulado poder para empequeñecernos espiritualmente.

A los que apuestan al oscurantismo para subyugarnos con la ignorancia inducida. Jamás temer al conocimiento para llegar a la verdad. Sólo debemos temer al Miedo, ese que nos limita y convierte en despreciables, aferrados a lo material para doblegar a los demás, temamos callar la consternación y opresión del prójimo.

Escuchemos y hagamos nuestras las sabias palabras del Papa Francisco, para que encontremos el verdadero sentido de la vida como hijos de Dios, de ese padre todo amor, que se regocija con nuestro triunfo y se atribula con nuestra desgracia.

Es el llamado de su conciencia crística, buscando arrojar luz sobre tanta tinieblas. No tengamos miedo, vivamos el esplendor de la vida, seguros de que Dios no hizo porquerías. Que nuestro valor va más allá del que los religiosos y sus secuaces nos hacen creer.

Rechacemos el miedo en sus múltiples manifestaciones, si queremos conquistar el reino de la tierra y los Cielos. Renunciemos a vivir vendados por conveniencias sociales. Apartaos de todo temor, si queréis alcanzar la libertad plena, y terminareis con las limitaciones.

EL AUTOR ES PERIODISTA

RESIDE EN NUEVA YORK