martes, 19 de agosto de 2014

DESDE MI VENTANA OPTICA :::::: SOMBRAS DEL PODER

"Desde su llegada al Palacio, ejerce el poder y la política diferente, reparte equitativamente el Presupuesto Nacional, invirtiendo recursos en sectores productivos, hacia donde nunca gobiernos miraron para brindarles apoyo"destaca el autor.

POR ALEJANDRO ALMANZAR

NEW YORK, EE. UU.- En cada periodo presidencial, críticos sociales, y políticos interesados hacen análisis sobre las ejecutorias de los gobernantes, donde destacan luces y sombras, o sea, aciertos y desaciertos de estos.

Con Danilo Medina, las luces se anteponen a las sombras, aunque todavía está a medio camino, y la historia le juzga al final del cuatrienio. Es el presidente mejor valorado, desde la fundación de la República.

Cosecha aplausos, hasta de los mezquinos de la actividad que Duarte definió como “la ciencia más pura y noble”. Pero veamos, el mandatario, en lugar de irse con su familia a vacacionar, a Juan Dolio, este, como todos los domingos, estaba en Restauración, llevándole soluciones a esa apartada comunidad.

Desde su llegada al Palacio, ejerce el poder y la política diferente, reparte equitativamente el Presupuesto Nacional, invirtiendo recursos en sectores productivos, hacia donde nunca gobiernos miraron para brindarles apoyo.

Democratizado el crédito, no sólo los capitalistas obtienen préstamos teniendo al Estado como garante, si no, que pequeños, medianos productores, pequeñas Asociaciones, Cooperativas, ganaderos y agricultores encuentran la tan deseada ayuda oficial.

Encamina al país hacia una Educación de calidad, con la Tanda Extendida. Otro logro, posiblemente el más importante, es el plan (Quisqueya Aprende Contigo), donde analfabetos comienzan a ver la luz de la enseñanza.

Pero, las sombras no faltan, y en su gobierno hay aspectos negativos sobre Salud, Transporte, Corrupción, Migración, Seguridad y Electricidad. Sobre todo, el espinoso tema inmigratorio haitiano, del cual esperamos salga airoso, para bien del país.

En esto último, el pueblo tiene sus reservas, a pesar del discurso en la Habana, Cuba, temiendo que ceda a presiones foráneas, para que la nación resuelva el problema haitiano, en perjuicio de su Soberanía Nacional.

Su compromiso no es sólo con el patricio, si no, con Juan Bosch, y el PLD, que tiene como Manifiesto “continuar y engrandecer la obra de Duarte. Para evadir esa sombra, debe quitar de su lado a funcionarios que quieren servirles a “Dios” y al “Diablo”.

En cuanto al transporte, el mandatario debe repartir mejor sus próximos dos presupuestos, para continuar la metromanía en la capital, y extenderla a otras ciudades, porque si bien es cierto que la inversión en la producción es necesaria, el desarrollo urbano no puede detenerse.

El Metro no es un proyecto personal de Leonel y Diandino, como algunos asumen, debe ser prioridad de cualquier gobernante que quiera terminar con esa pesadilla de la población, y el caos de sus auspiciadores.

No podemos pedirle que realice una administración sin las consabidas sombras, en una sociedad carente de todo, y limitada en recursos, pero aspiramos que el resto de su mandato sea para combatir la desigualdad existente aún.


Muchos, como el líder de los hateros, después de tanta gloria acumulada, terminan en el mayor desprecio. Jorge Blanco, sus primeros dos años, fueron impecables, y su final, un desastre, anduvo sus últimos días, muerto en vida, deseamos no sea el caso Danilo.

EL AUTOR ES PERIODISTA
RESIDE EN NEW YORK.

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