lunes, 20 de octubre de 2014

DESDE MI VENTANA OPTICA :::::: PETROLEO, ALIMENTO Y SALUD

"Países productores de petróleo obtienen muchos dólares por su comercialización, pero en su mayoría vive en pobreza, como quien tiene bacinilla de oro para orinar sangre, pues su alto precio encarece todo, impidiéndoles adquieran la supervivencia" dice Almánzar.



POR ALEJANDRO ALMANZAR

NEW YORK, EE. UU. - La humanidad vive, gracias a Dios, Jehová, Allah, Elohim, y demás denominaciones que le demos a muestra Divina Presencia, si es que se puede llamar vida a su agonía, porque el 4% de la población, controla estos tres elementos fundamentales para vivir.

Convertidos en “fórmula ideal” de exterminio humano; sin el petróleo, es “imposible” vivir, pues nos lo suministran hasta para respirar. Alimentos: Un monopolio llamado Oferta y Demanda, blindado con la “Libre Empresa o de Mercado”, obliga al 96% restante a agonizar para alcanzarlos mínimamente.
  
De último, y no menos importante, está la Salud, quizás lo más inhumano que tenga este criminal engranaje comercial. Y es que los poderosos no tienen límites, olvidando que su ambición está convirtiendo al mundo en una bomba de tiempo.

Países productores de petróleo obtienen muchos dólares por su comercialización, pero en su mayoría vive en pobreza, como quien tiene bacinilla de oro para orinar sangre, pues su alto precio encarece todo, impidiéndoles adquieran la supervivencia.

Fue la mayor visión de Hugo Chávez Frías, cuando puso en marcha el proyecto PETROCARIBE, consciente de que con el petróleo solo, no se vive, a menos que lo conviertan en además de combustible, en comestible.

El productor debe ser valorado, y sus frutos bien pagados, pero de qué sirve tener buenos precios por ellos, si la mayoría se pierde por falta de compradores. Comparto el criterio de economistas opuestos al aumento de salarios, para compensar pérdida del poder adquisitivo, y en su lugar plantean conciliación entre sueldos y precios.

En USA el salario es bajo, pero Ofertas y Demandas tienen límites, donde comerciantes no pueden hacer lo que les da la gana. La Medicina, respeto y admiro el oficio de Hipócrates, pero no es posible que esos servicios sean tan caros.

A su nombre, se aplican métodos contrarios a sus fines. Utilizada para intimidar, en lugar de curar, es así como nos bombardean 24/7 con campañas de supuestas enfermedades catastróficas, para afectar mentalmente a los ingenuos.

Ese grupito, dueño del Universo, posee Laboratorios para manipular a su antojo la conciencia humana, de quienes desconocen realmente qué es Dios. Por ejemplo, un medicamento tiene efecto hasta que ellos quieren.

De repente, lo cambian, y ponen al público a consumir otro, que muchas veces, sólo tiene diferente etiqueta y nombre. El cuco hoy, no es el VIH, ahora es el Ébola, de esta campaña intimidatoria, ellos sacan la mejor partida, mientras dejan el trauma permanente en los débiles espiritualmente.

“Dejen que los muertos, entierren a sus muertos”, y pongamos nuestra fe en el Dios verdadero. No sigamos haciéndoles coro a especuladores y pérfidos, que sólo buscan mantenernos de rodilla ante su afán de lucro.


A nuestros países pobres, igual les daría el Ébola, pues sus efectos nocivos nunca serán peores que las acciones del grupo que se ha repartido la tierra con sus especies, quienes no sólo les matan de hambre, si no, con campañas perturbadoras.

EL AUTOR ES PERIODISTA
RESIDE EN NEW YORK.

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