LEGADO DE MADRE TERESA DE CALCUTA SIGUE PRESENTE
SI ESTUVIERA VIVA, HOY LA MADRE TERESA DE CALCUTA CUMPLIRIA SU PRIMER CENTENARIOPOR RAMON MARTINEZ
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Hay quienes consideran que después de Jesucristo,la Madre Teresa es uno de los más grandes ejemplos de sacrificio y entrega por el bienestar de su projimo que ha tenido la humanidad.
NUEVA YORK.- Hace trece años que ella murió, pero el legado dejado por la Madre Teresa de Calcuta, no morirá al menos por las próximas décadas, en las mentes y accionar de personas que se dedican a auxiliar a los pobres, los enfermos, a los que menos pueden.
Inés Gonxha Bojaxhiu, o Madre Teresa de Calcuta, nació el 26 de agosto de 1910 en Skopje, hoy la República de Macedonia, de padres albaneses. En 1929 llegó a la India como novicia de las Hermanas de Nuestra Señora de Loreto. En 1948 dejó el convento para dedicarse a los más pobres. Dos años después fundó las Misioneras de la Caridad, una congregación austera y disciplinada. El resto es historia.
Estuvo al servicio de los más pobres entre los más pobres. A ellos les daba su amor, sus orientaciones, luchaba porque ellos tuvieran un techo, alimento, agua y ropa, a cada rato en el desempeño de sus labores decia "Haz las cosas pequeñas, con gran amor", esto le dejaba grandes satisfacciones y felicidad.
Era amante de la paz, disfrutaba saber que las familias marchaba bien y el mundo era un remanso de nuestro padre celestial.
La Madre Teresa de Calcuta, odiaba la violencia, de manera especial la guerra entre los pueblos y la misma familia.
Consideraba que sí el mundo quería marchar bien se debía proteger a las familias.
"La paz y la guerra empiezan en el hogar. Si de verdad queremos que haya paz en el mundo, empecemos por amarnos unos a otros en el seno de nuestras propias familias. Si queremos sembrar alegría en derredor nuestro precisamos que toda familia viva feliz." manifestaba la Madre Teresa.
La madre Teresa de Calculta murió el 5 de septiembre del 1997.
Después de fallecer, el legado de la la Madre Teresa de Calcuta, influyó a que se levantara un movimiento de miles de personas que pedian su beatificación, y el 19 de octubre del 2003, el entonces Papa Juan Pablo Segundo, la beatificó.
Su cuerpo descansa en la casa de la «santa de los leprosos», este lugar, se ha convertido en un lugar de peregrinación. Ahi asisten Musulmanes, hindúes, budistas, sijs, cristianos y ateos rezan y presentan sus respetos a la Premio Nobel de la Paz de 1979.
Trece años después del fallecimiento de la madre Teresa, sus misioneras de la caridad y un millón de voluntarios y trabajadores continúan cuidando a los olvidados, los parias, los enfermos de lepra y sida, de niños huérfanos en 137 países, perpetuando su legado de compasión y amor.
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